Es común que todas las mañanas partamos en día rabiando, ya que la ducha tiene problemas, el agua sale hirviendo o congelada. Debemos gritar a alguien para que regule el calefont o salir conrriendo en toalla, para regularlo. Y pensamos para nuestros adentro: “Debería llamar a un gasfiter!”.
Luego vamos a preparar el desayuno, y al lavar los platos quedamos mojadísimo, la grifería salpica hasta cielo, y volvemos al mismo pensamiento: “Debería llamar a un gasfiter!”.
Y así podemos ir descubriendo pequeños problemas en nuestro hogar, pero, por falta de tiempo, no le asignamos gran importancia a pesar de la excelente disponibilidad de Gasfiter en las condes.
Pero, hasta, que la manilla de agua se rompe por completo, o el calefont ya no calienta más el agua, o la gotera del lava plato es inmensa, que decidimos: “es momento de llamar a un gasfiter!”.
Sin embargo, al buscar por internet y cotizar sus valores, preferimos intentar de arreglarlo por nosotros mismos. Es más barato y sentimos que es más seguro, porque ningún extraño entra a nuestra casa.
Lo que es un error, ya que en la mayoría de los casos, no contamos con los conocimientos ni con las herramientas necesarias para arreglar nuestro problema en específico. Además los riesgos pueden ser muy altos, podemos romper una tubería o generar una fuga de agua.
Si bien, hay problemas de este tipo, que probablemente estemos en condiciones de arreglarlo por nosotros mismos, existen otras situaciones que al intentarlo podemos cometer un error mortal, como lo es una fuga de gas. Por lo que nos hacemos la siguiente pregunta:
¿Cuándo debemos llamar a un gasfiter las condes?
Como decíamos anteriormente, hay situaciones que debemos llamar a un profesional experto en la materia, para evitar un mal mayor. Estas situaciones son las siguientes:
Mantención de tuberías de alcantarillados
Reparacion y mantención de cañerías
Destape de alcantarillados y cañería
Destape sanitario
Limpieza de fosas
Filtraciones de agua
Fuga de agua y de gas
Reparaciones de calefont
Conversión de cocinas y encimeras
Instalación de campanas
Reparación e Instalacion de calefont de todas las marcas
Reparación de bombas, calderas y termos eléctricos
Fallas en artefactos a gas
Ahora bien, es normal que, dado que no tenemos conocimiento en la materia, tampoco sepamos cuál gasfiter contratar. Por lo que a continuación hay un listado de criterios para evaluar antes de contratar a un técnico profesional.
¿Qué criterios hay que tener para contratar a un gasfiter?
Las personas suelen decidir los contratos de estos trabajos de acuerdo al costo del servicio, no obstante por lo delicado que pueden ser, se recomienda decidir en base de los siguientes criterios:
Certificación: El gasfiter debe estar certificado por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (en adelante SEC) del Ministerio de Energía. Ya que el trabajo realizado por profesionales certificados es más seguro y tiene más garantías. Los instaladores SEC son personas que terminaron algún título profesional que acredite sus conocimientos y habilidades. El certificado es una licencia que cada instalador debe traer con sigo. Es importante saber que las certificaciones tienen una duración de 5 años, por lo que es de responsabilidad del gasfiter realizar el proceso de renovación de la certificación.
Calidad y Garantía: Si bien, un profesional certificado por la SEC debería ofrecer un trabajo de calidad garantizado, es fundamental verificarlo por nosotros mismos algunos elementos. Esto se hace a través de la revisión de sus herramientas, equipos y materiales, evaluación de su desempeño, e idealmente contar con recomendaciones del profesional.
Ubicación: Es importante que el gasfiter tenga cercanía a nuestra localidad, o que tenga disponibilidad para ir a trabajar a nuestro domicilio u oficina. Comunas como La Dehesa, Las Condes y Vitacura, por ser más alejadas puede ser más difícil o más caro de contratar estos servicios.
Disponibilidad: Hay varios gasfiter en las condes que no tienen mucha disponibilidad horaria, por lo que no nos sirve en caso de tener una emergencia. Por leso al pedir por sus servicios se recomienda preguntar por su disponibilidad.
Teniendo esos criterios en mente, deberíamos comenzar la cotización. Siempre verificando los aspectos profesionales como prioridad. Recuerden que lo barato cuesta caro.